sábado, 7 de mayo de 2011

La mirada femenina (columna social)

En el fondo y aunque había personal de pelaje variopinto, Dominguito Dominguín y otros fumadores variados al sol y se informa de que Alejandro Pizarroso ha dejado la pipa y ahora fuma unos cigarros rarísimos, el acto de presentación de Una mirada femenina del Toreo resultó un acto muy pijo. Con tías muy pijas, un acto muy PP copado por las señoras del PP, esas cornucopias de la derechona del toro fans de Esperanza Aguirre, condesa de Murillo a la que consideran una star, veneran hasta el empacho y les ríen las gracias, y que por lo que yo vi creo que en el fondo la presidenta de la CAM pasa de ellas olímpicamente.
Fui en plan Elsa Maxwell porque de lo contrario no voy. Así que nada más llegar, bastante antes de la hora fijada que es cuando la organización de todo evento suele perder los nervios con los problemas de última hora, salsa informativa, pillé de entrada que una de nosotras hablaría en el estrado en nombre de todas y el contratiempo no era otro que existían dos candidatas lógicas que daban la talla máxima: Ángela Hernández y Cristina Sánchez.
Protagonismos conocidos aparte, ambas propuestas eran indiscutibles, la representación tenía que recaer en aquellas que más hubieran expuesto, frente al toro, máximo exponente, y ambas toreras tenía méritos sobrados para el discurso de apertura. A Cristina Sánchez le avalaba el haber tomado la alternativa y haberla confirmado en Madrid, como MariPaz Vega, de la que soy partidaria y que no estuvo presente, mientras a Ángela le quepa el honor de ser la que abrió brecha en tiempos muy duros y ser además, de las veteranas, la más internacional.
Metí baza por supuestísimo y voté a favor de Ángela, que bordó el toreo de la palabra con un dominio escénico y una exquisitez tan grande en las maneras que fue aplaudidísima, rodada dama ante tanta cacatúas, a la que las muchachas del público descubrieron y lograron entender el calibre de uno de los personajes más literarios del toreo moderno.
Hablé con Ana Infante de Paco Umbral, con el que coincidió la joven torera en una rehabilitación y el brujo le dedicó alguna pieza literaria de las de enmarcar, y no le recordaba, no caía, "Ah, sí...", luego Ana Infante se entera muy poco de lo que la rodea.
Noticia de alta costura: el chaleco grana y oro que lució Noelia Jiménez en la presentación de su libro "Tinta y oro" fue confeccionado por mi amiga Isabelita, para mí la maestra Nati, que fue su madre la maestra, a la que le repetí que la más siniestra historia de machismo que conozco me la contó ella hace ya la tira de años, cuando yo pasaba muchas horas en su taller como si me encontrara en un oratorio, tiempos por los que por allí caía de íncógnito una luminaria de hollywood muy amiga de la casa, y tambíen recaló inesperadamente una tarde el modista francés Christian Lacroix a ver bordar a las bordadoras.
La que me negó el saludo por dos veces fue la desplazada Pilar González del Valle, marquesa de la Vega de Anzo, y me lo negó dos veces y la culpa la tuve yo porque pensé que la primera no me había oído, por la sordera, e insistí: me miró la tía, volvió la cabeza, y me dejó con la palabra en la boca, anonadada. Lo de esta mujer y la que firma es de película, lo nuestro ha sido de toda la vida, que conste, pero hará como un par de temporadas se acercó a mí la marquesona pidiéndome explicaciones por el cerril comportamiento en mi cansina crítica hacia ella, hablamos, le pedí disculpas por si acaso la había herido gravemente, le dije que no volvería a ocurrir, nos dimos un abrazo, y hasta hoy.
Achuché a Rosa Jiménez Cano, que llevaba prisas, como siempre, abracé a Pilar Abad y a Carolina Fraile con mis mejores deseos para la familia de Cortos, le di la enhorabuena a Paloma Aguilar, eché en falta a Mariví Romero y a Muriel Feiner, y Peñuca de la Serna se me escapó sin haberla saludado. Con mi admirada Dolores Aguirre no me atreví, ¡a ver!, la ganadera vasca impone, y por allí andaban también Josephine Douet y Anya Bartels, fotógrafas francesa y alemana respectivamente.
A Maribel Atiénzar la secuestré y en un rincón recordamos nuestros tiempos y la rabia de no habernos visto desde entonces. Vive en París, y le rogué que me refrescara la memoria de aquella tarde carabanchelera en la que se anunció a plaza llena con Miguelín y Antonio José Galán, dos eran dos, y nos dio la hora de comer añorando al murciano de Algeciras del que ambas somos devotas.
Alguien me empujó para que me pusiera en la foto final frente a un batallón de fotógrafos con más peligro que una caja de bombas disparando rayos y centellas ante un corro de damas como las del Ropero y allí quedé inmortalizada para los restos rodeada de tan selecta compañía. Mientras nos colocábamos, Esperanza Aguirre, a la que servidora conocía únicamente de vista y ante la extrañeza de su séquito de crotalonas, se dirigió a mí y me preguntó quien era, con mucha amabilidad y simpática a tope, sin populismo aparente, una seductora en estado puro peligrosísima doña Esperanza. Capté de primera impresión a una mujer muy inteligente, mucho, amplia, larga, con más percha política de la que me imaginaba, un peligro, ya digo, a la que la auguro la batuta de la charanga del PP, que debe coger cuanto antes y limpiar la gusanera de Génova por bien de tirios y de troyanos, pues del mal, el menos.

El próximo 17 de mayo, a las 12.30h y en la sala Antonio Bienvenida de la plaza de toros de Las Ventas, Maribel Atiénzar presentará su libro "Maribel Atiénzar, una vida en juego", con la participación de los periodistas Emilio Martínez y Paco Delgado, y Carlos Abella como Director de Asuntos Taurinos de la Comunidad de Madrid.

6 comentarios:

el chulo dijo...

que bien condesa!
magnifica resena!

Unknown dijo...

Ole, ole y ole. Me alegró mucho verla allí, condesa, pero nos debemos una charla más reposada.

Ludovic Pautier dijo...

Como si estuvieramos nosotros, contigo Amiga. perfecto, un "régal" de leerte.
un beso.

ludo

Judas Iscariote dijo...

Esperanza Aguirre, es "peligrosa", porque es el único político que tiene las cosas claras y lo que tiene que hacer. Para mi gusto es el mejor político del país con diferencia absoluta, por eso no la pueden ni ver las mujeres que se autodenominan de izquierdas. Es una señora hecha asi misma. Sin cuotas, que esta por su valía en el cargo. Y eso no lo pueden aguantar ni los machistas de turno sean de la idiologia que sean, ni las feministas de pancarta.
Un saludo condesa y felicidades por la cronica.

Anónimo dijo...

¡Sí que estuvo interesante la gala!
Me alegro que te divirtieras, a Ángela la ví por los alrededores de la plaza el Día de la Comunidad.

Saludos,
Riofrío

Aficionada dijo...

Inteligente, fresco, divertido e interesante. Sin duda el mejor de los leidos por mi sobre sobre la inauguracion de la exposicion "Una mirada femenina del toreo" Enhorabuena a la autora.