martes, 6 de abril de 2010

One sinatrazo


No sé inglés, y no digo eso de que no sé inglés ni Dios lo premita porque está muy visto y porque además yo no soy el señor Joaquín Cagancho, ni lo pareciera.
No obstante, hasta el minuto cuatro y cero cinco segundos del video que les ofrezco a ustedes, sin saber una ni mucho menos lo que suelta por esa boca el más sinvergüenza de todos los sinvergüenzas en escena cameladores, va y me gusta lo que dice a su manera.
Luego, tras el sermón, ya me gusta menos por previsible con su orquesta atrás sin ponerle un pero.
Ojito, que lo mismo estoy hablando de toreo y aquí lo que pudiera estar pasando es que no funcionara lo previsible y esto fuera que estuviera por un casual en manos de papagayos inservibles de la tercera edad fuera de onda (léase José Luis Marca).

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No sé si sería un sinverguenza en el escenario,fuera del mismo no se rodeaba precisamente de muy buenas amistades. Era muy amigo de Sam Giancana, capo de Chicago y tenía gran amistad con algunos de los más grandes personajes de la Cosa Nostra americana como Lucky Luciano, Carlo Gambiano y Paul Castellano, quien más tarde fue mandado asesinar por el célebre John Gotti. Se cuenta que la escena del Padrino, donde el director de cine se encuentra la cabeza de su caballo muerto, podría haber tenido cierta similitud con un episodio real relacionado con Sinatra y sus amigos.

Como cantante, le he ido descubriendo poquito a poco. De peque lo odiaba pero cada vez me ha ido gustando más. Su obra cumbre: It was a very good year, la cual no sé si por casualidad o no, sale en uno de los capítulos de Los Soprano.

Saludos Condesa, Riofrío.

EL CABALLERO NEGRO dijo...

Claro que esta hablando de toreo y como en el teatro y en lamusica en directo tambien en el toreo hay clac, sino que se lo pregunten a los del 7 y andanadas y gradas del 7 y 8 de las Ventas.

La condesa de Estraza dijo...

Esto es una prueba, estoy intentando contestar a las visitas y no entran mis comentarios.
Disculpen las molestias y disculpen también el aparente parón del blog.

La condesa de Estraza

Merywel dijo...

Unido a Frank está catalán Jean Leon, que llegó a Nueva York con lo puesto, consiguió trabajo como camarero en Villa Capri, por aquel entonces uno de los Restaurantes más lujosos de Hollywood, propiedad entre otros del actor Frank Sinatra, y del mítico jugador de béisbol Joe di Maggio.Jean León era conocido y respetado en los círculos gastronomicos de todo el país, pero todavía le quedaba algo por hacer. En sus innumerables cenas, comidas y banquetes, Jean León escogía el vino cuidadosamente. Aún siendo reconocido conocedor de vinos, se lamentaba de que, en múltiples ocasiones, no le era posible encontrar el vino “perfecto” , a su gusto.

Empezó entonces su segunda gran aventura; Crear un vino que llevaría su nombre, un vino único y especial para ponerlo en boca de sus más apreciados amigos. Para tal aventura era necesario encontrar la mejor tierra y clima, las mejores cepas y, finalmente, el mejor proceso de elaboración. Viajó por todo el mundo en busca de tierras, hasta llegar a Cataluña, allí, en el corazón del Penedés encontró e lugar que buscaba. Jean León adquirió la actual propiedad, constituida por 150 hectáreas de terreno arcilloso calcáreo y distribuida lo largo de una ladera ligeramente inclinada y orientada hacia el sur.

A continuación adquirió, pagando una fortuna, injertos de vides de Cabernet Sauvignon, Merlot y Chardonnay compradas todas ellas a bodegas francesas de reconocido prestigio como Château Lafitte-Rothscild, La Lagune y Corton Charlemagne. Ante la sorpresa de los viticultores del Penedés, mandó arrancar las cepas locales existentes y plantar aquellas desconocidas variedades. Jean León pasaba así a la historia por ser pionero en plantar variedades nobles en España.

Finalmente, se construyó la bodega y Jean León dio libertad absoluta a su enólogo Jaume Rovira para dotarla de los últimos avances tecnológicos y trabajar con los más exigentes criterios de calidad.

Ahora, como entonces, la bodega Jean León sigue fiel al dictado de su fundador. El enólogo Jaume Rovira supervisa personalmente las operaciones en la viña y en la bodega.

Esta es la increíble historia de Jean León: un joven idealista que se abrió camino en tiempos difíciles y vio realizados sus sueños. Los dos últimos años de su vida, aquejado de una grave enfermedad, los pasó navegando en solitario con su barco ” La Scala a Mare”. Era ésta su forma personal de decir adiós a aquel mundo que tantas emociones le había hecho vivir.

Hoy el recuerdo de aquel hombre genial y de su singular aventura nos viene a la memoria cada vez que descorchamos el vino que lleva su nombre: Jean León.¿Lo has probado Condesa?

La condesa de Estraza dijo...

Merywel: perdona el no haberte dado hasta el momento la bienvenida a este blog como merece una dama de tu alcurnia, ni haber respondido por correo a tus dos comentarios no publicables en los que te presentabas.
Tantas cosas por decirte... pero ando muy ocupada y las prioridades se imponen.
Eres digna hermana de tu hermano, uno de los hombres más cultos que conocí y más generoso con sus saberes, y todos te agrademos tu pincelada hablando de vinos y el descubrirnos a un personaje del que yo no tenía noticias y que parece un hombre interesante a tope, que vivió a tope.
No, no conozco ese vino ni ninguno, no entiendo de vinos, no soy de tierra de vinos y no he entrado en la cultura del vino tan de moda actualmente.
Siéntete entre nosotros como en tu casa, que en breve recibirás noticias mías, querida amiga.

La condesa de Estraza

Merywel dijo...

Gracias a tí.