sábado, 31 de mayo de 2014

Las pulgas de Abellán


  Miguel Abellán, con el pitón del toro, ya picado, a la altura exacta de las cejas

La corrida venía precedida por una campaña orquesta por la banda de música del twitter, pues los del twitter son especialistas en tirarse en plancha y pegarse unos barrigazos de la leche, y la corrida resultó una corrida muy interesante de ver y de analizar, por muchos motivos, toreros y no toreros, una corrida que también nos sorprendió a aquellos presentes que nunca nos adelantamos a los acontecimientos hablando de toros, pues nos enseñaron que en una actividad cuyo factor principal es la muerte puede pasar de todo lo pasable, 
y agoreros, los justos.
Twitter y el Plus son como Joselito y Belmonte: algo indivisible.
Una campañita tópica, llena de prejuicios de los jueces supremos de las redes sociales, invento que va a llevar a la ruina a la humanidad completa, a largo plazo, mientras que va a achicharrar ya mismo a algún figurante en particular hecho carbón ante nuestros ojos, y tiempo al tiempo porque aquí hasta la paredes oyen y chivatos haylos en cantidades industriales. 
Tópico y tópico y vengan tópicos -¡a ver!- y el tópico de tópicos residía ayer en que los animales eran de sangre Domecq procedentes del encaste bodeguero, con uno en el cartel que había salido en "Mira quien baila" como si salir en "Mira quien baila" fuera un delito para estos guardianes de la integridad folowers o incapacitara para matar toros, 
otro un murciano al que nadie conoce salvo el personal venteño que nos curramos la temporada entera, y un valiente mexicano inédito por esas plazas de Dios, al que aquí se le quiere mucho.
El que debe de tener malas pulgas por un tubo y eso es muy bueno para ser torero si se paga con el toro, es Miguel Abellán, que se jugó la vida sin trampa ni cartón ya en el primero de la tarde, de rodillas en chiquero y la imagen de David Mora rondándonos, aunque saliera de la batalla como un trapo llegando a la enfermería con una cornada en la axila, tras finiquitar gallardamente a su enemigo, y el riñón herido a punto de salírsele por la boca. 
Diera la sensación que aun sufriendo los efectos de los sedantes propios de una profunda exploración por parte de los médicos y tantos golpes en la cabeza recibidos, apareció Miguel de nuevo en el ruedo para apechugar con el toro que le quedaba y no dejar solos a sus compañeros de terna con la gayumbada del Montecillo, era el director de lidia, mientras se cruzaba por el camino con Paco Ureña que iba directo a la camilla de don Máximo con otra cornada gorda. Salía un hombre cosido, entraba otro con las carnes abiertas, y nos regalaron ambos uno de esos momentos historicos que sólo se viven en esta plaza de Madrid y que nos recuerdan que el estar allí, en ese sitio y a esa hora, es un regalo de la naturaleza por el que merece la pena vivir.
No me gustó la corrida, pero la corrida no fue aburrida ni decayó un segundo, corrida de muchas lecturas, mular, caballar, mular por las hechuras, caballar por el tamaño, hubo un brevísimo espacio de tiempo durante la faena de muleta de uno de los garlopos de Joselito Adame, el toro ya picado, luego mermado, en el que se perdía la figura del torero empequeñecida frente a la mole, en una desproporción que nada recordaba el intocable equilibrio entre las fuerzas, deforme el conjunto por completo, visualmente alejada totalmente la composición de lo que debe ser un hombre frente a un toro.  
Toros, sí, pedazos de toros, pero no toros de naturales, toros para doblarse con ellos, sobre las piernas el toreo todo, por la cara, doblándoles el cuello sin compasión a base de cintura, a sobarlos sin respiro, con torería, nada de estarse quieto frente a ellos ni de intentarlo, para en cuanto se pueda y mejor pronto que tarde montar la muleta y meterles media lagartijera como buenamente se pueda, sin perder la compostura y arriba.
¿Hubiera aguantado hoy la afición venteña esas prácticas trogloditas de la era del cromañón?
Esta es mi duda.      

Alarmo: se da el caso de que llega uno y le hace con 
el móvil una foto a la corrida en los corrales, 
¡desde arriba!, 
y va el que sea y apuesta por un toro, tirándose su correspondiente rentoi 
en el twitter para presumir ante los amigos. 
Así las cosas, se ruega a los escasos twiteros 
que crean opinión, que encaucen a los más jóvenes y contribuyan a
 su debida formación como aficionados, imponiéndose la cordura.
Lo contrario es letal cara al futuro.

15 comentarios:

Madroño dijo...

"Los del twitter son especialistas en tirarse en plancha y pegarse unos barricazos de la leche, y la corrida resultó una corrida muy interesante de ver y de analizar, por muchos motivos, toreros y no toreros, una corrida que también nos sorprendió a aquellos presentes que nunca nos adelantamos a los acontecimientos hablando de toros, pues nos enseñaron que en una actividad cuyo factor principal es la muerte puede pasar de todo lo pasable,
y agoreros, los justos"


Olee...No puedo estar mas de acuerdo, ¿Tan difícil es ir a este espectáculo con la mente abierta a las sensaciones y con el único objetivo de disfrutar hasta de los mas mínimos detalles??? Aunque imagino que de esta forma no se pega uno el pisto con los "entendidos"

La condesa de Estraza dijo...

Me da mucho miedo la nueva afición, y eso que hay mimbres, sobre todo mimbres venteños, como siempre pasó.
Aquí, Madroño, un ser humano, yo, que odia las redes sociales y que a través de ellas está conociendo para su sorpresa una nueva faceta de la condición humana, con la que no contaba.
Lo de twitter no me cabe en la cabeza, me pongo a diez años vista y en el toro, entre los aficionados, puede haber suicidios.

OFERTA: les paso a los taurinos de las poltronas madrileñas, avispados personajes que las cazan al vuelo, una idea que vale millones, gratuitamente.
Teniendo en cuenta que el tema más trillado en aquel zoco (fuera #fuerzafulanito, ya, coño) no es otro que el supuesto estado etílico en el que se encuentra el personal una vez sentado en la piedra -dependiendo de las tardes- ustedes muy cucamente podrían utilizar la certeza del pasote general en su propio beneficio, en tardes aciagas, difundiendo el rumor desde las tribunas que controlan de que el comportamiento levantisco de la plebe se debió en exclusiva a que estaba borrocha toda ella como cubas.

Gracias por su visita, Madroño, buenas noches a todos.

La condesa de Estraza

Madroño dijo...

Cambian los tiempos, aunque desgraciadamente yo no lo haga con ellos, esto es un reflejo de la sociedad actual, basta con ver una parada de autobús hoy en día, nadie habla, todos con el jodío móvil, hace años se comentaba sobre el tiempo, o sobre lo que tardaba el 2 en llegar posiblemente por las obras de Manuel Becerra que por cierto hay que ver como esta Madrid con las obras y así se ligaba una conversación con otra mientras el puñetero 2 llegaba a la parada de marras. Con la nueva ola de "Afisionáos" ocurre lo mismo, se ha perdido la tertulia, o mejor dicho, se ha perdido el ir a escuchar a los mayores a una tertulia, aquellas donde no se te ocurría abrir la boca, aquellas donde con los ojos como tazas te quedabas embobado escuchando la sabiduría con la que desgranaban el festejo donde te traducían todo lo que tus ojos habían mirado pero no visto minutos antes. Se ha perdido escuchar a los viejos, ahora se lleva leer "Tierras Taurinas" y ronear de conocimientos...Eso quizá sea lo que mas me jode...Que atrevida es la ignorancia señora Condesa, que atrevida.

Alfredo Ponce dijo...

Señora Condesa, cuánta razón. Los nuevos aficionados no hace más que palmear y escupir en twitter pero luego, en la plaza, no saben si lo que ha salido es un becerro charolé o un toro como Dios manda.
¿Qué sabrán, si cuando se hicieron aficionados ya ni ponían corridas por la tele? Hay alguno que apunta maneras pero saben mirar una pantalla mejor que un ruedo y no creo que eso sea muy bueno.
Feliz día.

el Chulo dijo...

Tierras taurinas, me cago en la madre, perdon, es de francia del mago Viard.
Hoy en dia es mas taliban que los talibanes de antes que el mismo insultaba.
Cuando el senorito viard cantaba los meritos del dios juan pedro, y de las figuritas que tanto daban a la corrida.
Y tambien no entendia el viard con mierdatoros porque algunos buscaban en viznar y otros sitios.
No al deber de memoria decia, despreciando un simple deber historico. Y a este proposito digo que es distinto olvidar y perdonar.
Cuando se leen sus escritos se entiende que lo mejor es olvidar lo que se estaba pensando anos antes.
La verdad es que, totalmente descreditado por la aficion francesa, tuvo refugio en espana, en el pp y la presidente de la communidad de madrid, ayudado por l'ambassde de France à Madrid, es decir que paguemos su existencia en espana y esta credencia increible que el salvo la corrida.
y ahora esta intentando reunir a la aficion francesa y sobre todo para dominarla.
Todo eso me hace reir carino!LLorar no, porque la vida, ya sabes me enseno otros motivos de llorar, igual que a todos nosotros. vaya payasos!.

La condesa de Estraza dijo...

Queridos amigos: hoy ha sido un día muy duro para mí, durísimo, pero ya está vencido, hoy ya es mañana, todo es recuerdo.
Gracias por la presencia de ustedes aquí, mañana se normalizará el blog y seguiremos adelante -¡esos poetas, ustedes!- como si no hubiera pasado nada.
Chulo, ¿cuando hablas de Viznar, que lo pones en minúscula y eso me despista, te refieres al barranco de Viznar?

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Viznar, no, Víznar, con acento en la i, no sea que vuelva por aquí mi corrector ortográfico, un jambo que firmaba como Don Julián, de cuando el Betialai, o sea Miguel Manchibarrena, aquel "mandao" que me pegó un palizón obedeciendo órdenes y hasta me sacó un blog como recordarán los lectores más viejos de este espacio para contar mis intimidades.
¿Y qué sabría el tal Mamarrachín de mis intimidades a no ser las contadas por el pobre Pepecarlos de Fernandez y Villaverde y de Silva y Bazán?

La condesa de Estraza

PD: ¿Vivirá Opsen, el tal Marcelo Fortín, que tiene nombre el julai de personaje de Macondo clavaíto?

Madroño dijo...

Chulo, o señor "El Chulo"...respecto a lo de Viard...No puedo estar mas de acuerdo con usted, comenzaba a pensar que era yo el único que opinaba de esa forma...Gracias.

La condesa de Estraza dijo...

Buf, Madroño, el Viard, salgo a tomar café y luego hablamos.

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Efectivamente, Madroño, son redes asociales, a mí me gusta el tema, soy humanista, y devoro toda la lectura que cae en mis mano sobre ellas.
Usted es nuevo, pero todo los demás lectores saben que pagué el pato en forma de un palizón en los principios de este invento, aplicado a mi persona por desconocidos, y me llegaron a llamar hasta desde Canadá enterados los canadienses del acoso. Si quiere no personifico, aunque si lo hago es porque resulta que es lo que más al alcance tengo, y entonces ponemos la antena en las alturas más alta y caemos en el payo Urdangarín y sus biznes, con las consecuencias que han traído hasta ayer mismo, y al choro del Urdangarín le han trincado por los e-mails, por unos simples e-mails, lo terrorífico reside ahí, qué veneno tendrá semejante invento.
Estas cosas, ahora las lleva usted a la Monumental, a sus traidorzuelos y a sus chantajistas, chotas a miles por allí, y entenderá perfectamente el comportamiento de la plaza.
En las redes sociales no existen los amigos, mentira, ¡pero si ya es difícil encontrar uno en la vida!, pero circula el personal como si lo fueran, teniéndose unos a otros cogidos por ahí mismo en correos electrónicos a cientos desde mucho tiempo atrás, MD o como se llamen, que si tuvieramos la suerte de que algún día se rompieran las falsas alianzas nos íbamos a enterar de cosas muy gordas.
Acierta usted, antiguamente pasaba lo mismo, o peor, se largaba lo mismo, o más, pero no se hacía a través de un ordenador, sino en una tertulia, y las palabras se las lleva el viento y papeles son papeles.
Ah, sé de dos plantas carnívoras dedicadas a la colección de pantallazos y un pantallazo puede tener más peligro que una vara verde.

La condesa de Estraza

(continuará)

La condesa de Estraza dijo...

Alfredo Ponce: aplíquese el comentario anterior que va para Madroño, uf, la nueva afición, no toda, lógicamente, ¿cómo es posible que gente tan poco preparada, lógicamente por edad aunque también hay algún "tarra" de nuevo cuño con responsabilidades gordas en el catastrófico estado de la plaza, hable con tanta soltura de lo que ignora? Si no han visto torear, ni picar, ¿quien torea hoy con el capote?, ni banderillear, ni parar un toro de salida y fijarlo, ni matar arriba con gallardía, Manzanares, al que odian por guapo, ni hacer un quite, ni una cuadrilla geométricamente bien colocada, nada de nada, y es lógico que no lo sepan, insisto, porque no lo han visto, pero de ahí a que se siente cátedra y tengas que comulgar con ruedas de molino, o estar a la que salta porque agresividad tambíen hay por un tubo, va un mundo.
O la afición de Madrid medita y vuelva a ser lo que fue, o esto se va al garete antes de lo que pensábamos con la valiosísima ayuda del abono actual.

La condesa de Estraza

Madroño dijo...

Me deja usted atónito, señora Condesa, si sabía de la agresividad con que se las gastan para imponer según que criterios, argumentos o incluso intereses, vaya usted a saber, pero no conocía la vileza de esta fauna, lógicamente con el valor que les da el ampararse en la masa, pues he podido comprobar en mis carnes, que solos y en el cara a cara, en las distancias cortas y cuando te cruzas tal y como ellos piden, al pitón contrario, ahí,ahí se rajan y buscan el amparo en tablas.

Ladran, luego cabalgamos, estimada condesa.

La condesa de Estraza dijo...

Claro, Madroño, son gallitos, gruperos, en cuanto los tienes cara a cara se rajan, cosa común por otra parte, siempre ha habido hombres cobardes y hombres valientes, lo que choca, y hablo como aficionados, es que sean incapaces de entender las lecciones que se imparten en el ruedo.
Todo el mundo sabe que yo soy una loca partidaria de Diego Urdiales, ¿se imagina alguien a un tío como Urdiales tirando por tierra la reputación de una mujer desde el anónimato?
Pues eso ha pasado entre aficionados, y está pasando hoy en el twitter con una respetable partidaria de Alejandro Talavante, y todos sabemos quien es la señora a la que han arrastrado su nombre y todos suponemos quien está detrás de ese falso perfil, o fake, es público, pero nadie ha levantado la voz por ella o ha salido en su defensa lapidando al criminal, salvo dos twitteros que lo condenaron: @milinko y @dominguillos, y salvo mi solidaridad demostrada aquí:
http://depezonarabo.blogspot.com.es/2014/03/dia-de-la-mujer-que.html

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Creo que es lo último que me queda, hablar de Viard en contestación al Chulo y a Modroño, ambos de acuerdo al opinar sobre el renacentista personaje francés, aunque el Chulo en este blog se desboca cada vez que tiene ocasión y yo por el Chulo pongo la mano en el fuego, pero por Viard, no.
Yo a André Viard no le conozco de nada, no me van los renacentistas, soy más bien de especializados, ni me gusta su colección de Tierras Taurinas, de dudoso rigor a mi manera de ver a pesar de sus propangandistas, pero que no me guste a mí un autor no tiene importancia ninguna.
Lo que sí le tengo yo en cuenta a este matador de toros francés es la desafortunada carta que le escribió a Julián López, El Juli, torero que no me gusta absolutamente nada, y no me gustó precisamente porque Viard es matador de toros.
No sé, cada uno es libre, pero la jerarquía que siempre existió entre toreros es sagrada, y con lo sagrado no se juega, si nos cargarmos la jerarquía esto si que es ya una merienda de negros, las tradiciones hay que conservarlas, el tratamiento debido debe cuidarse entre coletas, así pasó siempre y así debe seguir pasando, la jerarquía se da hasta en el Olimpo, o quizás con más razón torera allí por la cosa de la épica.
No tengo nada en contra de André Viard más que lo dicho, la vida y la obra de este pensador francés no me interesa nada.

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Creo que es lo último que me queda, hablar de Viard en contestación al Chulo y a Modroño, ambos de acuerdo al opinar sobre el renacentista personaje francés, aunque el Chulo en este blog se desboca cada vez que tiene ocasión y yo por el Chulo pongo la mano en el fuego, pero por Viard, no.
Yo a André Viard no le conozco de nada, no me van los renacentistas, soy más bien de especializados, ni me gusta su colección de Tierras Taurinas, de dudoso rigor a mi manera de ver a pesar de sus propangandistas, pero que no me guste a mí un autor no tiene importancia ninguna.
Lo que sí le tengo yo en cuenta a este matador de toros francés es la desafortunada carta que le escribió a Julián López, El Juli, torero que no me gusta absolutamente nada, y no me gustó precisamente porque Viard es matador de toros.
No sé, cada uno es libre, pero la jerarquía que siempre existió entre toreros es sagrada, y con lo sagrado no se juega, si nos cargarmos la jerarquía esto si que es ya una merienda de negros, las tradiciones hay que conservarlas, el tratamiento debido debe cuidarse entre coletas, así pasó siempre y así debe seguir pasando, la jerarquía se da hasta en el Olimpo, o quizás con más razón torera allí por la cosa de la épica.
No tengo nada en contra de André Viard más que lo dicho, la vida y la obra de este pensador francés no me interesa nada.

La condesa de Estraza