lunes, 29 de abril de 2019

Sigue el disparate venteño



Ayer se lidió una señora corrida de toros en Madrid, anunciada como novillada, que embistió.
 ¿Bien presentada? 
No, mal presentada, por exceso, y resalto esta moda actual de aprobar la presentación del ganado por el tamaño, a más tamaño, mejor presentación, ande o no ande, porque para empezar para que una novillada se considere correctamente presentada lo primero que tiene que ser, y parecer, es una novillada.
 Pero a mí, como aficionada, estas barbaridades ya me dan exactamente igual, paso olímpicamente del matadero venteño. Ahora bien, también como aficionada, exijo a los organizadores de esta carnicería municipal que, atendiendo a lo lógica más simple, y en justicia, si los ejemplares que se lidiaron ayer en la plaza de la capital de lo que hasta hoy es España colaron como novillos para tres destacados aprendices de un oficio tan duro, cuando se anuncien toros, exijo, ya digo, que suelten en lo que hasta no hace mucho fue la primera plaza del mundo y para que los matadores de alternativa la despachen, auténticos mastodontes que sobrepasen en alzada la altura de las tablas, largos como trenes, que tengan cara de catedráticos, y con leña por delante, retorcida, que les lleguen los pitones hasta el mismísimo cuello del tanque caballo de picar armarios.
Ay, la sagrada proporción en arte, pateada ahora en el toreo sin que nadie alce la voz, recortado conjunto escultórico, en movimiento, del que fuimos testigos en tiempos pasados que no volverán.

Foto: Antoñete y Atrevido, su altura justo a la faja del de mechón, como es debido, un auténtico monumento al eterno arte de torear en legendaria faena.

2 comentarios:

La condesa de Estraza dijo...

Bs, PC, mi querido Pepe Campos, recibido tu correo al que contestaré en breve.
Y ahora, cuando más tranquila estaba, uno de los madrugueitors, insultos incluidos, me dice que yo soy comunista porque nunca he vivido en un país comunista. Mira, julai, yo ni he escrito ni he dicho jamás que sea comunista, entre otras cosas porque no lo sé, y, claro, ahí aciertas, soy comunista porque no he vivido nunca en un país comunista, porque de lo contrario, de vivir en uno, es posible que no fuera roja como la amapola que entre los trigales sale, ya que una es propensa a posicionar contra el poder, pudiera ser por el hecho de que conservo un puntito de la rebeldía infantil de la que siempre gocé.
Te lo explico muy elementalmente, estúpido mindundi que estáis más vistos que el TBO, y calados ambos, porque muy orteguianamente, mis circunstancias sean esas precisamente (no he padecido un régimen comunista) no evita que mi ideología sea la que es y tengo todo el derecho de ver el mundo como me dé la gana.
Como lo de haber nacido y criado en la dehesa me hace con más probabilidades de ser aficionada a los toros -no he vivido bajo un régimen comunista, por eso soy de izquierdas- que si acaso hubiera venido al mundo en Siberia, lo mismo me espantaba la sola idea de presenciar la matanza de un corrida de toros, que tan largo me caería.
Largo de aquí, chalao, que mal fin tengas.

La condesa de Estraza

PD: perdone el lector posibles faltas de ortografía o de mecanografía, o si acaso no me he explicado debidamente, voy corre que te corre.

La condesa de Estraza dijo...

Lo siento, esta intervención mía va en la entrada anterior, pero con las prisas, y por error, la he editado en esta.

La condesa de Estraza