lunes, 22 de septiembre de 2008

Adiós, María

Nos separaban apenas siete metros, justo lo que va desde su puerta a la mía, el descansillo de la escalera era la única distancia entre nosotras. Compartimos la misma enfermedad al tiempo, yo la superé aunque con una leve recaída que vino como el tremendo coletazo final de un cachalote herido a perturbar mi verano, ella no. Hoy ha fallecido María, mi querida vecina, tras no haber logrado vencer una profunda depresión de origen sentimental, como todas las depresiones profundas. Era guapísima, culta, con una personalidad que arrebataba, una artista, trabajadora y limpia por dentro y por fuera, jamás vi una piel tan bella y tan cuidada como la suya, se ha ido una mujer de cuarenta y siete años que deja atrás a un hijo adolescente. Ha muerto María y yo me he quedado aquí, mirando por la ventana de mi cocina a la suya apagada y muda, mientras caía la noche y en el patio se hacía la oscuridad fatal. El silencio cubre los tejados húmedos de lluvia y yo tengo como la cara lavada de tanto llorar, he echado de menos el soniquete alegre de un tenedor a ritmo golpeando un plato a la hora de la cena, la radio puesta, el tendal perfumado, las buenas noches, ánimo, y hasta mañana. He bajado las persianas, ha muerto María, de pena, y me ha dejado un poco más sola de lo que estuve ayer.

19 comentarios:

Jon Muñoz dijo...

Bendita sea.

Mi más sentido y profundo abrazo Condesa.

Anónimo dijo...

Lo siento.

Anónimo dijo...

Lo siento, un beso muy fuerte y adelante siempre.

Tony

Ana Pedrero dijo...

Deseo que María vuele en paz y que llueva su alegría sobre todo lo que deja.

Carmen, mi queridísima Carmen, te estoy abrazando desde nuestra Salamanca. Te quiero.

Hitos dijo...

Triste historia. Un abrazo Condesa y mucho cariño.

Anónimo dijo...

Carmen acabo de perder un amigo y en stos tristes momentos te acompaño en el sentimiento de la pérdida de tu amiga maría.
un saludo
Pgmacias

Anónimo dijo...

Lo siento Condesa, imagino lo que siente si pasaron por lo mismo juntas, y tambien imagino la crueldad de los que se rien y mofan de estas cosas, Vd. lo sufrio en carne propia y lo sufre, Maria no se si sintio esta crueldad, Vd. tuvo mas fuerza y lo supero, descanse en paz.

Anónimo dijo...

"..algo se pierde en el alma, cuando un amigo se va"
Animo.
Salud
El Coronel

Anónimo dijo...

Un beso muy grande, Condesa.
Mi Torero no corre

Anónimo dijo...

joder, vaya rachita llevamos, Sra Condesa...
ánimo, que creo q es lo único que se puede decir

Andrés de Cáceres

La condesa de Estraza dijo...

Queridos amigos: incorporada a la vida laboral de lleno, iré contestanto a uno por uno de ustedes a medida que me lo permita el tiempo.
En este caso, comenzaré por el comentario final, el de Andrés de Cáceres, pues estaba yo muy preocupa por no haberle mandado siquiera un abrazo al camarada extremeño por la dolorosa muerte de su Juncal abuelo.
Querido Andrés, sí, atravesamos mala racha pues también ha muerto mi amiga Samara, una emigrante brasileña muy querida en el barrio, sin techo y sin familia, manca del brazo izquierdo, lesbiana, mulata y alcohólica,
a la que se le paró su inmenso corazón una tarde cuando nadie se explica qué iba haciendo en un autobús de línea, rumbo a Toledo.

Andrés, que la ausencia de tu querido abuelo la suplas con la amistad y la camaradería, es mi deseo.

La condesa de Estraza

Anónimo dijo...

Condesa, recibe mis más sentidas condolencias, ¡ánimo!

JCR

La condesa de Estraza dijo...

Queridos amigos: incorporada a la vida laboral de lleno, iré contestanto a uno por uno de ustedes a medida que me lo permita el tiempo.
En este caso, comenzaré por el comentario final, el de Andrés de Cáceres, pues estaba yo muy preocupa por no haberle mandado siquiera un abrazo al camarada extremeño por la dolorosa muerte de su Juncal abuelo el pasado domingo 14 de septiembre.
Querido Andrés, sí, atravesamos mala racha pues también ha muerto mi amiga Samara, una emigrante brasileña muy querida en el barrio, sin techo y sin familia, manca del brazo izquierdo, lesbiana, mulata y alcohólica,
a la que se le paró su inmenso corazón una tarde cuando nadie se explica qué iba haciendo en un autobús de línea, rumbo a Toledo.

Andrés, que la ausencia de tu querido abuelo la suplas con la amistad y la camaradería, es mi deseo.

La condesa de Estraza

Unknown dijo...

Joder, es gordísimo. Me dejas con el corazón encogido y con la boca sin aliento.

Te debo una charla. O varias.

Besos.

Anónimo dijo...

Sra Condesa,

Maravillosa y emotiva entrada.

Le mandamos un abrazo muy, muy intenso y calido desde esta isla.

No esta sola...

Tony Vauxhall
London

Ludovic Pautier dijo...

señora condesa,
no tenia el honor de conocer a maria pero su epitafia me la acerca mucho.
hay ! y samara ! benditos labios de camaron cantando su nombre.
si no fue dedicada a la samara brasileña que nos cuenta, seguro que el de la isla, si fuese vivo y por desgracia sabemos el hueco abismal que padecemos sin el, no resistiria a decirle otra vez para ella :

Samara fue "elegía" por los moros reina de la morería.
"Toíto" el pueblo la adoraba,
le rezaban noche y día
porque la reina Samara, con su cara tan gitana, una virgen parecía
Ay, Samara, reina de la morería.

Samarita, sí,
Samarita, no,
Samarita mía de mi corazón,
Samarita mía de mi corazón.

desde mi cabaña gabacha, a su lado siempre, señora amiga condesa.

ludo

Judas Iscariote dijo...

Que cerca de ese pozo estamos todos, pero no nos damos cuenta, hasta que cae alguien cercano. En está vida moderna, en la que la mayoría tenemos la suerte de no precuparnos por buscar la comida, solo tenemos que pagarla. Está silenciosa enfermedad de la depresión, acompañada de la soledad sonora, nos acecha detrás de cada puerta.
Descanse en paz María y que en el cielo encuentre lo que le ha negado la vida.

Anónimo dijo...

Mis más sentidas condolencias Condesa, mucho ánimo y con la mirada bien alta y mirando al futuro con optimismo.

JCR

La condesa de Estraza dijo...

Jon: cuando has venido a casa, ¿la llegaste a conocer?

Gracias, Fernando, oye, creo que eres nuevo y no se de donde vienes, lo que si sé es que no te he dado la bienvenido. Siéntete entre nosotros como si llevaras por aquí toda la vida, y vuelve.

Tony, otro beso para ti, el mío un poco más débil que el tuyo, chincha.

Berrendita en 'colorao': yo también te camelo a tí. ¡La tía!, que ha metido la pelota definitivamente y ya no hay quien la pare. Felicidades, a bordarlo y cuidate de la ciudad.

Recibido tu cariño, Hitos, yo también os mando el mío, primica.

Pgmacías, gracias, parece mentira el hueco que deja una amigo de verdad, cuando se marcha para siempre.