Hoy 5 de abril, día de San Vicente Ferrer, predicador y visionario, hubiera cumplido Alfonso Navalón setenta y cinco años de edad.
En su recuerdo, para que no se olvide su obra y para que su figura permanezca entre nosotros, por tantas cosas, va mi pequeño homenaje con estas cuatro letras para el que fue el mejor cronista de la Historia del Toreo.
sábado, 5 de abril de 2008
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10 comentarios:
¡Menuda sorpresa me he llevado! Resulta que Navalón cumple años el mismo día que mi señor padre, así que lo del carácter ya sé de dónde viene, jeje........ ¡estos Aries!
He leído bastantes artículos de Navalón, desde luego nadie queda indiferente ante ellos. Me gustaría conocer tu opinión sobre él como cronista taurino. Ya sé que con frecuencia entraba en temas personales de los toreros y eso es algo que no me gusta pero sería de agradecer unas reflexioes tuyas sobre él y sobre la incidencia que han tenido sus tesis entre los aficionados. Un saludo y buen finde condesa.
Anónimo: excepto a mi particular corrector ortográfico, un grimoso, en este blog no se contestan los comentarios sin firma, aunque sí se admiten. Pero su caso es especial. Ha sido usted el único amigo que a lo largo de la jornada de hoy ha tenido un minuto para, junto con la que firma, recordar la emblemática figura de Alfonso Navalón, un Aries de Marte, un guerrero absoluto.
Para hablar de mi peripecia al lado de Alfonso tras treinta años de amistad, compañerismo, camaradería y el compartir algún secreto, broncas diarias, noches de farra, necesitaría yo siete vidas. Alfonso fue un ser irrepetible al que acribillaron los taurinos, para empezar lanzando toda clase de bulos contra su persona. Como este de que se metía en asuntos personales de los toreros a los que criticaba. Que sí, aunque depende del torero, pero es que Navalón era implacable con sus enemigos, bravo como nadie, un ser que siempre dio la cara, y en un mundo de hipócritas que tanto le hirieron, deslenguado como era, atacó con toda la artillería que pudo a todos aquellos que le vendieron, que fueron muchos. Combatió la doble moral, no tragaba con la cobardía, Alfonso en ese sentido fue un hombre de la cabeza a los pies. Puede creerme, conozco a mucha gente que le tenía más miedo que a un Miura, no a él, que era inofensivo, sino a la letal arma de su pluma
Ah, no fue un santo.
La condesa de Estraza
PD: Nunca me ha gustado presumir de mi amistad con determinados hombres que tuve la suerte de conocer, pero esta noche me voy a tirar un rentoy. Si les apetece lean lo que el extraordinario escritor charro escribió sobre mi persona, siendo yo la competencia, para que vean, en "Tribuna" de Salamanca. El texto, precioso, no existe nada de lo que me sienta más orgullosa, se encuentra en las recopilaciones de su página.
si,desde aqui,terra nostrum,
señor Don Alfonso, por donde VD esta, un fenomenal saludo -este saludo que me quedo en la garganta un dia que me cruze con su melena de nieve y sus ojos leales por la plaza mayor mas linda de españa-.
ludo
Gracias por contestar Condesa, es la segunda vez que me pasa , escribo el mensaje y se me olvida poner el nombre debajo. Mil disculpas, el mensaje anónimo es mío.........JCR
Mihura se escribe con h intercalada, o no conoce usted la obra del gran surrealista madrileño, señora mía.
Ludo, le saludaste, pero ¿departiste con él? Porque esto también me gustaría a mí que lo supiera JCR, que Alfonso Nabalón fue un hombre simpatiquísimo. Faltón de entrada porque era muy tímido y le gustaba medir a la gente, aunque si le parabas los humos a tiempo, como a los toros bravos, se te entregaba solito.
Seguiremos hablando de Alfonso Navalón.
La condesa de Estraza
Lógicamente quise escribir Navalón -uve- no sea que, como fray Savonarola no puede vivir sin frecuentar este blog que tantos disgustos le está dando, me mande mi corrector particular directamente a la hoguera ortográfica.
Corrector: cabrón.
La condesa de Estraza
no, no, lo siento y lo lastimo pero me quede mudo.
igual de timidez el y yo, seguramente.
pero fue su fiel lector (como firma los comentarios a su prosa uno que pasa por ahi de vez en cuando).
pienso que vd sigue linea pero con personalidad propria, por eso me encanta.
ludo
Siempre admiré a Navalón como cronista taurino e incluso como escritor, conferenciante, etc
Pero para mi perdió todo el valor cuando dijo en Antena 3 TV, que él afeitaba sus toros porque de lo contrario no los vendía.A partir de esa noche, dejé leerlo y para mi murió.
Saludos
Solo me recojo en mi soledad, me relajo y pienso en Alfonso, des
chado de defectos y virtudes, pero claro, honrado, valiente como nadie.
Y ademas bajo su aparente chuleria humilde, vamos un Dr. House de los toros.
Los lameculos a lo suyo y a abusar de ellos que para esto estan, los que dan la cara amigos incondicionales.
Salud, Alfonso.
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