domingo, 20 de abril de 2008

Atención, atención

A ver, se llama la atención a los de la suerte de varas zaragozana:
esta tarde se ha matado un toro en la plaza de Madrid desde el caballo, como lo oyen, simplemente, y hagan algo ahora que se van a reunir ustedes, en cuyas manos encomendamos nuestros espíritus impuros y en ellas confiamos.

Me refiero concretamente al asesinato perpetrado contra el tercero de la corrida de este domingo de abril, de la ganadería de Julio de la Puerta, dio 517 kilos, negro, de nombre Cortijero.
Que no se ha debido el crimen a otra cosa que a las evidentes deficiencias de un picador a la hora de saber montar, nulas, un saco de patatas encima del penco el hombre, el numerito corriente, la desesperación, la acorazada de picar vidaliana campando a sus anchas.

Aclaración: Soy de esos aficionados madrileños que no se fían nada, en absoluto, de los datos que ofrece el programa de mano. Por tanto, lo consulto poco, así que copio en esta ocasión textual sin responsabilizárme de la información. El matarife con castoreño y chaleco de oro al que me refiero no es otro que el picador de turno José Chacón.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Me permio recomendar que lean en el blog del manifiesto la ponencia enviada desde Perú por el aficionado Fernando Marcet, ahi se podran entender porque suceden hechos cuasi delictivos como el denuncia el presente post y de paso ya que estan comparen la citada ponencia, fundamentada, razonada, basada en la realidad historica de la fiesta brava y el decalogo huerfano de argumentos que proponen los organizadores del II Encuentro de aficionados, saquen Vds. mismos las conclusiones.

Anónimo dijo...

Condesa, estoy completamente de acuerdo contigo, el picador hizo una buena escabechina.
Por cierto , ¿qué opinión te merecieron los toros? A mí me pareció una corrida con mucho picante, me hubiese gustado ver a más de uno delante de ellos, incluso sin viento.

Anónimo dijo...

Anónimo, presiento que es usted nuevo en nuestra reunión, bienvenido, aunque me encantaría que si le apetece volver por aquí utilizara un nick. Si es reconocible por visitar asiduamente otros espacios y no quieres que se sepa que se mezclas con la morralla de "depezón", invéntese un nuevo alias para que al menos le podamos reconocer por aquí.

No vi la corrida en unas condiciones óptimas, el frío era polar y no logré entrar en temperatura en toda la tarde. Pienso que la corrida lidia en otras condiciones medioambientales, por esos tres, que los hay peores, lo mismo hubiera resultado un espectáculo muy diferente.

La condesa de Estraza

Anónimo dijo...

El "Caballero Fernando Polo" autor del parrafo que recojo en este blog sobre las Sra y Srtas.de Gelsa, en el articulo -no merece este nombre- mejor en el ejercicio narcisista y cuasi delirante tambien explica que metodo de compra la misteriosa empresa de Zaragoza por las diversas ganaderias de campo español.

Reproduzco textualmente:

"" Ya de broma, entre risas, y mandándole callar en alguna ocasión, como “empresa” le dije que el toro de la concurso se le abonaría conjuntamente con la corrida de la feria en octubre, eso sí, probablemente antes que el de la concurso de Ariza del año pasado"


Sobran comentarios, pero si destacar que este tipejo es uno de la organizadores del II Encuentro de Aficionados que se dedicara a buscar soluciones a la suerte de picar, seguro que propone que los toros tambien se piquen a plazos.

¡En que manos pretenden que nos conformemos a estar¡.

Anónimo dijo...

Kalikatres, porque es usted un lujo de comentarista para un blog, de lo contrarío le amonestaría por meter aquí, campo minado de por sí, semejante carga explosiva.

No sé de lo que habla, aunque barrunto irregularidades a tutiplén y respecto alo de las señoras de Gelsa, ya lo manifesté, me parece una pasada bochornosa que viene a herir a todas la mujeres. También lo he publicado porque, al margen de mi lío personal, los lectores tienen derecho a conocer lo que usted aporta.

Coño con el loco, no, si el loco va a conseguir poner a más de uno contra la pared. Modérese no obstante, amigo, que estoy muy "delicá".

La condesa de Estraza