Estas son las vergonzosas palabras de José Luis Lozano que serán comentadas en breve en este blog en una nueva entrada que queda prometida pues la provocación merece un refresco a modo y toda la cobertura de que se disponga resultará poca. Labor que se aplaza pues ahora, lunes 5 de enero, 16.00 horas, otros asuntos de índole personal requieren todo mi tiempo y no me encuentro en condiciones de escribir.
Adelanto: señor Lozano Martín, estoy completamente de acuerdo con sus declaraciones, "no hay periodistas". Pero le recuerdo que el principal culpable de que en estos tiempos no haya grandes periodistas de toros es usted, y basta de tan cínico discurso ya que todavía queda gente que, sabiendo todo lo que sabemos sobre ocultas movidas, además tenemos fresquísima memoria.
El presente párrafo está sacado del blog del simple y obediente vetador Mariano Ballesteros, cabeza de un grupo de aficionados taurineadores que van de finca en finca llevando y trayendo cuentos como aquellos que van al zoo. Desvelando secretos que sólo deberían pertenecer al arcano de aquellos criadores con orgullo de serlo, libres de la trampa para osos que supone el mamoneo total y la peligrosa coba de todo forastero ufano de relacionarse con los brujos de la tribu.
Excursionistas de cámara al hombro, payasos en el encinar, correveidiles que son utilizados como monigotes por la picaresca campesina. Catetos que hablan con irritante suficiencia facilitando número, datos y destino de las reses reseñadas para futuras corridas a lidiar en determinadas plazas de postín. Bobos individuos procedentes del asfalto que sirven en la dehesa como casual y gratuita máquina propagandista, únicamente, pues a la hora de la verdad ningún ejemplar de todos aquellos que con tanta facilidad y conocimientos nos hablan y hablan, sale luego allá donde dicen que les han dicho que digan y para adonde -a tan largo plazo- les aseguran que están destinados.
Señores ganaderos, ¿saben ustedes que el toro para conservar su innata fiereza debe permanecer en su hábitat lo más alejado posible de la civilización sin contacto alguno con el hombre salvo con aquellos escasos profesionales que se destinen a su manejo?
¿Pero esto que coño es?
10 comentarios:
Aquí lo que pasa es que unos ponen el cazo, y otros lo llenan. Igual de culpables todos. Y los que van de honrados generalmente son más malos que arrancados, porque no basta con escribir bien, o con saber, o con ser honrado. Hay que estar adornado de las tres virtudes y tenerlos además muy bien puestos, y de esos, como muy bien dice Lozano, no queda ni uno en el mundo taurino. NI UNO.
Simplemente genial admirada Condesa, verdades como puños dichas con concision y ajustandose al realidad.
Lo que esta en el secreto del sumarui es si estos excuersionistas payasos del encinar iban encabezados por el flamante gerente de la Misericordia Fernando Polo, pondria las manos en el fuego que si y el viaje fue sufragado como parte d elos gastos publicitarios, peroen este mundo toddo se sabe y mas en corto que en largo tiempo.
Sra. Condesa, si es curioso que Lozano haga ese comentario, Muy curioso.
Ya lo aviso, dentro de poco: "los pajaros se tiraran a las escopetas."
Besos
Salud
El Coronel
Pd. Con su permiso Sra. Condesa.
Noelia, me es imposible hacer comentarios en tu blog. Estoy jo..cabreado.
La situación de la crítica taurina es, en líneas generales, preocupante. El problema no se circunscribe únicamente a los medios escritos, los portales de mayor audiencia en internet, los medios radiofónicos y, sobre todo, los medios televisivos son culpables directos de esta situación.
El problema no es que dejen de informar sino que además desinforman y manipulan a la audiencia a su antojo, unos por supino desconocimiento y otros por “intereses ocultos”. Como en este blog todos somos medianamente inteligentes, no creo que haga falta aclarar lo que quise decir en el entrecomillado.
Del desastre, y que me perdonen los que no nombro por no conocer de primera mano su trabajo, se salva el cada vez más amplio mundo de la blogosfera taurina (excepto algún que otro manipulador) y, cómo no, el profesor Rafael Cabrera, director del programa El Albero, de la Cadena Cope. Cabrera es actual presidente de la Unión de Bibliófilos Taurinos, antiguo abonado de la plaza de Las Ventas y un hombre que llama a las cosas por su nombre pese a haber recibido amplias críticas del mundo del taurineo.
También es justo dar las gracias a todos aquellos que nos permiten expresar las cosas tal y como las sentimos con total libertad de expresión. Va por ti, Condesa.
JCR
No menciona a Vidal ni a Navalón, de qué críticos habla este individuo de La Sagra?.
Por otro lado, condesa, habla de etéreas utopías al desglosar su opinión sobre la visita a las fincas, etc...no mezcle la velocidad con el tocino, por favor.
¡Qué cojones tendrá que ver!
Navalonero.
Carmen:
deberías olvidarte de la hueca de Estradas...
Tomar los mandos y poner en orden este galimatias de tanto majareta en internet que se cre Dios!,
como tu solo tienes capacidad valor de tía grande, conocimientos
e independencia.
Lozanos, listas negras...
¡de periodistas!
¡de toreros que todos sabemos!
Curro Vázquez, Esplá, Aparicio, José Tomás
de ganaderos,
y de todo lo que a estos delincuentes molesta.
los Lozanos se han pulido la plaza de Madrid llevándose el dinero a espuertas y somos muchos su víctimas...
Carmen, adelante, muchos profesionales del toros, estaremos contigo.
PROFESIONAL
Chapó!
Muy buenas y Reales tardes Magas.
Se da la circunstacia de que por primera vez en depezón no estoy de acuerdo con las opiniones vertidas por la mayoría de los comentaristas de este post, aunque con otros, como siempre, existe una total sintonía. Lo cual no me preocupa nada, al contrario, me causa una tremenda satisfación porque es la única forma de crear debate, la división de opiniones, la disparidad de criterios. Lo de hablar entre aficionados sin crisparnos, herirnos o dogmatizar, sin dar la brasa quejica siempre con el mismo soniquete que aburre a las ovejas, la única forma la de utilizar la palabra, bálsamo con capacidad para curar todos los males habidos y por haber.
Vamos por orden:
Anónimo: Dicho lo anterior, lo suyo sería que todos ustedes firmaran con un nick.
Destaca usted cuatro cualidades, que entiende imprescindibles, para valorar a los periodistas taurinos: escribir bien, saber de toros, ser honrado y tenerlos bien puestos.
De acuerdo con tres, ahora bien con la cuarta en absoluto.
Dice usted honrado, ¿honrado?, demasiada virtud no en periodismo sino en cualquier faceta profesional, así que aplíquese el cuento y repase -en este sentido- el nivel que existe al respecto allá donde usted labore.
Nada de honrado, mucho pedir, el periodista de toros
-como el de "vacas"-
debe ser independiente, con eso sobra, y ¿dónde está la independencia de los periodistas taurinos de hoy?
En cuanto al asunto de que usted le dé la razón a José Luis Lozano, ahí ya salto. Miré, este hombre está desautorizado para ponerle un sólo pero a la prensa actual de toros, que él ha creado en su pesebre.
Le cuento, en todos y cada uno de los ambientes del toro se da por hecho que los terratenientes hermanos de Toledo son, entre otros, los propietarios del tabloide "Aplausos". Puro y extendido rumor, pero sólo eso. Ahora bien, lo raro es que servidora lo ha escrito y publicado de todas las maneras posibles en La Gaceta de Salamanca y, puede comprobarse, no ha sido mi persona obliga a rectificar ni se ha recibido una cartichuela al director por parte de esta potentísima familia exigiendo ningún tipo de recteficación.
Un rumor, ya digo, los Lozano son los propietarios de "Aplausos", presuntamente, supuestamente, al parecer, no sea que me entrullen.
Pero lo que sí es cierto es que esta familia, que se llevaba más de mil millones de pesetas de las de los años noventa de la bicoca venteña, editaban una revista para los abonados. ToresmaII -¿por qué II?- y no entraba en su política económica pagar a ninguno de los colaboradores, todo para la buchaca, ni destinar siquiera unos miserables cinco kilitos del multimillonario fajo para que la tropa informadora fuera tirando.
Valiente manera de cuidar la cantera... ¿este es el chorvo que ahora se queja de que no haya críticos serios con la suficiente categoría?
Bufo... hasta dentro de un momento, señores, ahora vuelvo y sigo.
También yo chapó,
doblando la cintura,
y a su pies
Sra. Condesa.
Gracias, Caballero, y me quedo corta en mis lozanas apreciaciones porque tengo lastre para ir soltando en cantidad. Ya está bien, hombre, ya está bien, que no se nos toquen tanto y tan payamente los costaos, joder.
Por otra parte creo que el flamante gerente de la Misericordia, a la sazón Fernando Polo, no ha encabezado la excursión zaragozana. No olvide usted que es un taurino de primera, que a partir de ahora se va a tapar moito y no lo vamos a volver a ver en plan txerrijana en mucho tiempo, ni dando la cara en marrones semejantes de descolocados aficionados zaragozanos.
Aprovecho la ocasión para desearle con retraso un feliz año nuevo, salud y alegría. Asi como reiterarle mis gracias públicamente por haber resultado usted -un desconocido- un aliado perfecto desde la indepedencia absoluta que agradezco, única menera de que servidora medio se funcione con resultados óptimos.
Gracias siempre, ahora recuerdo hace un año -¡qué potencias, chacho, metían miedo!- y se me parte la caja de la risa esta noche cuando compruebo la achantada situación actual
Quién lo hubiera dicho entonces, dos enfermos, ¿recuerda?, usted y yo, que solitos y sin que nos corroan las vanidades simples, hemos frenado una maquinaria que parecía imparable.
Mi abrazo fuerte, querido amigo Carlos Carbonell.
Chsss, un momento, que habla el Coronel. Porque si aquí existe un elemento humano venteño puro ese es él.
Coronel, permítame comunicar a la audiencia que usted nació a unos cien metros de la Monumental de Madrid, en el piso de encima de uno de los locales más concurridos por público y afición en general, más la totalidad de los aficionados Íntegros, de todos los garitos de fama que rodean la plaza.
En cuanto a lo de pedir disculpas por dirigirse desde aquí a Noelia, ande, tírese de la moto y dedíquese en su retiro a organizar otro encuentro en el que nos volvamos a ver las caras.
Usted, Coronel, sabe que esta es su casa.
La condesa de Estraza
Publicar un comentario