jueves, 29 de mayo de 2014

Asuntos personales

   
Tomillero, de Ibán, muy bravo, el toro de Madrid

Ni toro Tomillero ni leches, ya hablaré de él, ese toro a mí no se me olvida, pues antes que nada deseo hablar de mí, y de mi caso en Internet, ya que mi caso refleja a la perfección la catadura moral de la inmoral afición venteña de nuestro tiempo, la de la ya olvidada chapa en pecho, y ahora van y taurinizan ustedes los acontecimientos que evoco. 
Así, traduciendo unos simples hechos personales, que afectan únicamente a una abonada más, yo, comprenderán a la perfección las malhadadas reacciones de los tendidos venteños que desde principios de siglo, más o menos, vienen mostrándose: sol de protagonista, la sombra observándolos.
Lo mejor de todo, nene, papel grande para apuntar y memoria grande para recordar, peste de citas, citador. 
Total, que la que aquí firma el 23 de mayo de 2012 al término del festejo y de camino a buscar un coche aparcado por la zona, entró en el bar Waniku, de la calle Bocángel de Madrid, para ir al baño. En la puerta, un grupo de aficionados al fresco estaban tomando cañas, con un danzante de abolengo y de cuyo nombre no quiero acordarme moviendo la coleta más en plan caniche que nunca, cuando va el danzante y tuvo los santos cojones al verse arropado por los amigos, de saludarme muy atento. De mi boca salió sólo una sola palabra, una, que no la pongo y no la pongo porque el andoba en cuanto te meneas te mete un juicio que te cruje y yo creo que ya vamos por el quinto, una palabra, decía, única, solté, esa palabra que escupida por boca de una mujer, deja a un hombre seco. 
Pasé al baño, me recompuse y salí de nuevo cuando calculé que los acompañantes que había dejado atrás con las urgencias meódromas habían llegado a la puerta del garito y podrían ampararme, como así ocurrió. Eran mi sobrino Carlos, sobrino de sangre, y mi sobrino Alvarito, en acogida, dos armarios treintañeros ajenos por completo a lo que allí se cocía, luego sin arte ni parte.
Bien, ya el trío junto, salimos como pudimos del grupo, cuando al llegar al final del corro una joven y zancuda patilarga, de nariz de ave, me soltó dos insultos como dos lapos que se me pegaron en la cara como dos sellos y que en el hueso amarillo de la frente llevo grabados a escoplo, se advierte. Con mofa general hacia mi persona, todavía me retumban las carcajadas, agachando nosotros la cabecita hasta vernos libres, no sin antes implorar yo que no se volviera como toros ninguno de los dos mozos que me escoltaban.
No para ahí la cosa, meses después, en octubre, en un acto del CEU, alma mater de los ciclos invernales tras Rafael Cabrera mi amiga Beatriz Badorrey, parte del grupito haciendo piña tal que suelen, y, de nuevo, encontronazo. La parte del grupito como siempre del resto separada, como los toros de muerte, mientras que el grueso del los asistente al acto nos alpisteábamos a escote, hablando sanamente de toros y de toreros.
Los Íntegros, como se calificaban a ellos mismo en otro tiempo -eso, eso, el toro íntegro y el hombre corrompido- y ya que yo le dedique una entrada por entonces a Beatriz debido a un homenaje que le dio la Universidad a Ángela Hernández, Ángela en los carteles, es que no me dieron ni respiro, son acosadores, y por aquí entraron a saco por tal causa, pegándome cachiporrazos como si servidora fuera el muñeco del pimpampún.
Todo, con la bajeza de decir que en aquel bar, con aquel grupo de amigos aficionados alternando como la primera, gente a la que conozco de toda la vida, ellos aparte como queda dicho, yo estaba desplazada, despreciada, rechazada, y me encontraba sola.
En aquel grupo de íntegros al que me refiero, los que entraron por aquí como rayos a martirizarme y se entiende que uno de ellos por lo menos sería el autor de la marranada pues de lo contrario no se encuentra explicación y están los textos muy acertadamente publicados en este blog, había cinco personas, y estos son sus nombres:
Gloria Sánchez Grande, Rubén Sánchez, de la Asociación el Toro de Madrid, del blog reflexionandoalaverónica y en las redes Cartujanillo, Óscar Escribano, bloguero y por @alonsodeiniesta conocido, Pedro del Cerro, @dominguillos, y Juan Pasmo de elrincondeordoñez.blog, señor al que libero de toda responsabilidad, pues le tengo por un tío.
Continuará no se sabe
   cuándo (pues me queda mucho que contar, mucho) y dependiendo.
Reiterándose que taurinicen los hechos para
 mayor comprensión de la pelotera venteña.
 Foto: elrincondeordóñez

21 comentarios:

Anónimo dijo...

¡¡¡VIVA LA ESTEBAN!!!!!!!


VENTEÑO

Anónimo dijo...

¡¡¡VIVA LA ESTEBAN!!!!!!!


VENTEÑO

La condesa de Estraza dijo...

Gracias por los vítores, VENTEÑO, que viva usted.
Al margen, y hablo en plata y que eso no lo dude nadie, me retan los lectores deluxe del clavel reventón con los que colegueo por la plaza minutos antes del comienzo del festejo, alrededores del bar del 2, a que no oculte la identidad de ese pobre hombre de cuyo nombre no quiero acordarme, como refejo en en el texto... y retos a mí, no, que yo soy una chica desobediente, o eso parece.
SE TRATA DEl EXCELENTÍSOMO SEÑOR DON JOSÉ CARLOS FERNÁNDEZ-VILLAVERDE Y DE SILVA BAZÁN, conde de Estradas.
Y ahora vamos a la guasa para no perecer tan severos y amuermantes, al que algún cachondo ya empiezan a llamar como conde de Estraza, y bendito sea Dios por mantener viva la picaresca venteña viva.

Buenas noches, que descansen ustedes y felices sueños para todos.

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Urge que todos ustedes lo sepan, al minuto los necesito orientados, sigo hablando de la deriva de Las Ventas, manta de la que voy a tirar así me maten, y va directa mi intervención lógicamente a los del Sálvame diario venteño bajo el manto talibán, que esos sí que tienen peligro, oculto.
Ese mismo día que fecho en la entrada, a 23 de mayo de 2012, cuando la Rebeca Fuentes Arcos, la @rebefucos, va y me insulta amparada por el insípido coro de Íntegros aficionados venteños sitos en el Waniku que la envalentonaron, se cumplían seis meses, exactamente seis meses, ni un día más ni un día menos, el 23 de mayo fue, repito, hacia seis meses, de un acontecimiento del que sólo sabemos el señor conde de Estradas y yo.

Tontinos, que sois unos tontinos.

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Repito: este asunto personal que narro aquí, completamente cierto, que yo no miento, necio, es más, modérate y no me lances sarasillas puyitas, inofensivas a estas alturas, dan en hueso, ve de frente conmigo, chavorró, como hacen los hombres, y deja de informarme así mismo de reuniones con tu cuchipandi de rorros y no veas si canta tu ansiosa búsqueda de alianzas con otros aficionados de la andanada con más percha taurina y humana que vosotros de aquí a Lima, (*), está trillado este asunto en este blog, decía, en entradas anteriores con anónimos comentarios tirándome 'puñalás' intercostales desde el anonimato que no vean ustedes lo que duelen y más cuando se encuentra una delicada de salud, insisto que estos asuntos personales que traigo a la palestra deben leerlos la afición sana para llegarse a explicar la relación existente entre los abonados venteños: una guerra civil en toda regla, el divide el graderío y vencerás en los depachos, que tanto han añorado los taurinos venteños en otras época, y que los actuales gobernantes de la plaza están aprovechando muy sabiamente a su favor, y yo les felicito.
Me he puesto de ejemplo yo, señores, pero ahí tienen ustedes a asociaciones varias de jóvenes aficionados que derecho tienen a que les guste Manzanares, o el padre de Manzanares, don José Mari, y que no sabemos cómo van a evolucionar como aficionados, siendo insultados, vejados, descalificados, humillados y sirviendo de risa, boicoteadas todas la actividades que proponen, machacados, por el mismo grupito venenoso y desde la supuesta superioridad, que se atribuyen, por el simple hecho de ser partidarios de Fernando Robleño y otras hiervas castañas del torismo atroz.
Dicho esto, y para rematar pues tanto en la vida como en la arena se deben rematar las faenas ya que el pasado siempre vuelve y a veces vuelve en forma de tartazo en plena cara, aclaro lo siguiente:
1 - De los juicios que hablo en la entrada, celebrados, creo que cinco, la acusada siempre fue servidora.
2 - En este mismo blog hay un comentario, anónimo, publicado muy acertadamente por mi persona, advirtiéndose muy seriamente de que ni se me ocurra volver a pasar por el Waniku, que volveré, y yo me pregunto, señores jueces, ¿en algún caso una advertencia así puede considerarse una amenaza?
3 - Hablando de amenazas, la que aquí firma fue amenazada por última vez, vía telefónica, el domingo 28 de abril de 2013.

La condesa de Estraza

(*) ¿Quién es el caballero que se sienta codo con codo en la andanada del 9 a la vera de José Ramón Márquez?
Pd: mirad, niños, que aquí hay hombres como la copa de un pino sean del bando que sean, discretos señores, hombres de otras épocas, y no vosotros, cuenteros de mierda, ignorantes, que acabáis de llegar y no conocéis los intrigulis de un espacio tan difícil de dominar como la plaza de toros Monumental de Madrid, listillos, que váis de listillos.
Fin por ahora, que voy hablar en cuanto pueda de la bueyada de ayer, a buscar fotos me dirijo.

La condesa de Estraza dijo...

Mi intervención anterior está escrita prácticamente del tirón, tengo mucho trabajo, así que ruego que sean pasados por alto los posibles gazapos.
Gracias, amigos.

La condesa de Estraza

el Chulo dijo...

Oye condesan, no conozco el Waniku cuyo nombre Waniku para mi evoca mas un burdel que un bar de convivialidad.
Aunque no me guste este tipo de bar y prefiero los que el coro me enseno y donde la gente parece muy sana, seria una felicidad acompanarte, aun mas sabiendo que esta volviendo el peligro de Lima, si no me equivoco.
un besazo guapa!

el Chulo dijo...

Me lo olvidaba! Ay Robleno! Que temple, que toreria, que lentitud que arte! Es broma eh! Nunca me gusto! No es toreria mia. Necesito quietud, lentitud, temple, diminio y arte et que el torero pise el terreno de los buenos toreros y de las buenas faenas! Buenas no significando nerviosas, agitadas, buscando las gradas.
besos

La condesa de Estraza dijo...

No, Chulo, el Waniku es un garito muy simpático, el típico bareto de los alrededores venteños, que el Coro debe conocer mejor que nadie pues ya sabes que el Coro nació en el edificio donde hoy está el Puerta Grande, según él vió la primera luz debajo del grifo de la cerveza, ole mi Coro, con gente muy maja ese Waniku salvo estos cuatro pelagatos que van de chanar y están 'pegaos', y que a mí me lo descubrió, el Waniku, Antonio Corbacho una noche que me llevó allí con Alejandro Talavante y el Okupa, al volante.

La condesa de Estraza

el Chulo dijo...

Pues me equivoque pero no me gusta el nombre. No entiendo porque el coro no me lo enseno!

el Chulo dijo...

nacio el coro un poco mas arriba del Puerta Grande.

La condesa de Estraza dijo...

Chulo: a mí tampoco me gusta el nombre del Waniku, me cuesta memorizarlo y escribirlo además, y estoy por apostar que lo conoces, que el Coro te llevó allí alguna vez.
En cuanto a Robleño, ¿cómo un torero como Robleño nos va a gustar a unos aficionados -a esa clase de aficionados- como tú y como yo?
Pero vamos a dejar en paz al matador de toros madrileño que hoy es su santo, con nuestra felicitación y nuestros deseos de que lo contraten muchas veces en Ceret.

La condesa de Estraza

El desdicho dijo...

Me pronunciaré en lo que debo, o sea sobre los toreros que aquí habéis citado. Personalmente Robleño me parece un pedazo de artista, matador excelente donde los haya, y sobre tó a contracorriente como los valientes.

En cuanto a Talavante, fría presencia, talante correcto. Sabe hacer bien lo suyo, pero sin más. Me parece mejor torero Perera.

Y en cuanto a Manzanares, ¡qué decir! Siendo hijo de quien es ¡qué te vas a esperar! Su lidia es el súmmum del destoreo. Y me pregunto yo: ¿acaso no sabe lo que es arrimarse? Noo, mejor, replanteo la pregunta: ¿acaso no sabe para qué sirve cargar la suerte o lo que eso significa? A éste hay que pararle los pies.

La condesa de Estraza dijo...

Qué curioso, Desdicho, por sus intervenciones tenía yo otra idea como aficionado de usted, le imaginaba un aficionado de mucha edad, cuando su admiración por Robleño me descoloca, admiración que respeto como no podría ser de otra forma, pero de la que soy completamente contraria y eso no tiene arreglo, depende de los gustos.
Sobre Talavante y Pepera nueva contrariedad, no hay color, para mí Talavante es mejor torero que Perera de aquí a Lima. Pero, ojo, que desde este invierno tengo yo puesta la visual en Perera, se adelantó por aquí antes de su zapatazo en Madrid, y mire usted como ha puesto la feria. Qué sorpresa tan agradable, y le queda la de Adolfo, la del de la Puebla de Prior, tan bien recibida por la que aquí firma que podría llegar el día del "donde dije digo..." y quedarse tan pancha servidora.
¿Manzanares?, de acuerdo en casi todo, a mí no me dice nada, ya digo en el texto que torea como la tropa chusquera, ahora bien, por contra a la tropa de culibajos periféricos, despegados, ese pico y ese toreo en línea, Manzanares tiene un fisicazo que le da muchísimo empaque, estamos además de en un combate en una representación escénica, y ello para determinados públicos asistentes a las plazas esporádicamente le entra mucho por los ojos.
Ahora bien, Manzanares con la espada es el mejor que yo he visto y tengo imágenes suyas de una ortodoxia matando que no se me van a olvidar, en tiempos de bajonazos infames y puñaladas traperas, y matar así es un grado en este puto mundo del toro, mi querido amigo.

La condesa de Estraza

La condesa de Estraza dijo...

Perdón, donde digo "Pepera", quise decir Perera.
Buenas noches a todos, señoras y señores, que descansen.

La condesa de Estraza

Anónimo dijo...

Disculpas por la intromisión, Sra.Condesa.

Ql Desdicho cuando habla que a JM Manzanares hay que pararle los pies, pregunto
¿se los vas a parar tu?

Si no tienes lo que hay que tener para firmar con tu nombre y le vas a parar los pies a un señor Matador de Toros....

Esto está perdido con gente así, mis respetos a la propietaria del blog,

Saludos.


SOY DE MADRID

La condesa de Estraza dijo...

No soy yo la que tiene que contestarle, SOY DE MADRID, es nuestro amigo El Desdicho, que espero que lo haga civilizadamente pues les recuerdos a todos ustedes que están en casa de una dama.
Y broncas no quiero ni una que bastante tengo con las que yo formo, tan oportuna y deliberadamente. Tarde rejones -dos animales contra uno, como los Íntegros- con la señora condesa tirada en la turca de su estudio corrigiendo "original" por estas mansardas, y es que me hablan de Manzanares y como si se me quitaran las ganas de cenar.

La condesa de Estraza

Alfredo Ponce dijo...

Llego tarde a esta intervención Condesa. Es que he estado unos días sin conexión decente...
No sabía yo de estos asuntos. Alguna vez paro por el Waniku, bar normalito pero muy vivo hasta eso de las once.
Hay varios grupos fijos siempre, pero no me ubico.
Condesa, usted es grandeza -como el toreo-.

El desdicho dijo...

Apetece opinar.

Desde siempre he comprendido el toreo como la lucha del hombre vs. la bestia. Cada uno con sus armas. El primero con inteligencia e imaginación; el toro con fiereza. He aquí los primeros conceptos esenciales.

La imaginación del hombre en la lidia conlleva sorpresa, variedad e incertidumbre.
La bravura conlleva imprevisibilidad y hace que el animal embista con los riñones, metiendo la cara de verdad. Es una cualidad intrínseca de la casta, como tb lo son la nobleza, la humillación, el ir a más, (hay quienes incluyen la clase), etc.

Ahora bien, por naturaleza el toro embiste de una manera: en línea recta, o sea como un tren, siempre hacia delante. * Luego cada casta posee sus matices, claro. Pues, es el hombre, toreando con capote o muleta, el que consigue que el astado vaya por donde no quiere ir por naturaleza; eso es someter al toro, ganar la lucha. Ya lo dijo Domingo Ortega.

Según qué casta y qué toro hay que andarle o no. Al toro de poder, al bravo, se le somete con unas técnicas de toreo fundamentales: con el capote principalmente verónica y media; con la muleta los doblones, los pases de castigo, el natural, el ayudado por bajo doblándose con el astado.

Las chicuelinas, revoleras, delantales, gaoneras, navarras, puerta gayolas, manoletinas, etc. (o matar sin la muleta como hizo Fandiño) no son más que adornos, que están bien, muy estéticos, pero no dejan de ser eso.

Pongo un ejemplo cercano: Tomillero. Un bravo de Baltasar Ibán, encastado, con clase, humillación, embistiendo con los riñones, de poder (lo demostró metiendo la cara abajo en el caballo y empujando). Si el matador, en este caso Bolívar (superado, vencido), hubiese conseguido someterlo cargando la suerte en sus muletazos, de pitón a pitón, en ochos, etc. se habría dado lo que para mí es torear.

¿Por qué las figuras como Manzanares destorean?

Primero: sólo lidian la misma sangre, lo cual significa mismo tipo de toro, carácter, condición, hechuras, misma manera de embestir (si a eso se le puede llamar embestir), etc.; mismas ganaderías, hijos de los mismos sementales y vacas, fofos, bobalicones, rajados, sin clase, tirando incluso derrotes, y encima por norma general muy desiguales ¡JA! Ejemplos cercanos: la de ayer de Montealto o la del otro día de El Pilar (o Cuvillo, El Ventorrillo, Danielitos, Fuente Tymo, Juan Pedro, Zalduenditos, Garci., etc.). ** Reconozco q de vez en cuando sale un bravo aunque es muy improbable.

Segundo: repiten una faena-tipo, tirando continuamente líneas, de perfil, sin cargar la suerte, excesivamente alejados, fuera de cacho, pegando dos muletazos y pase de pecho (quitándoselo de encima), escasa de ritmo, sin variedad, sin riego, ni chispa ni emoción. Se exalta la movilidad ¡hurra! (la cual no tiene nada que ver con la casta) y cómo el toro acompaña el trapo más que embiste.

Pues, eso es el destoreo y así empieza, para estallar más tarde en un galimatías sinsentido, es decir carente de sorpresa, desprovisto de cambio, es lidiar por lidiar, algo rutinario, simétrico, previsible, aburrido, en resumen… un guión cerrado.

*** ¡Ojo! he dejado clara la vertiente torera que defiendo, con el toro bravo delante. De todos modos, eso no quita que haya visto maestros torear al redondo, al son de la elegancia, ligando pases y pases y llevando tb al toro por derroteros que no desea; ¡con torería! Ahora pienso… ¡puede que esa manera sólo valga con toros nobles y sin poder!

**** Ahora caigo en que quizás exageré al calificar de "pedazo de artista" a Robleño; mejor lo dejo en buen torero.

***** Corregidme cuanto queráis, soy un aficionado joven señora Condesa.

Anónimo dijo...

Haga el favor de no nombrarme en sus escritos.
Gracias

@cartujanillo

La condesa de Estraza dijo...

Señor @cartujanillo, ¿quién es usted para insinuar siquiera a quién debo yo mencionar o dejar de mencionar en mis escritos? ¿Qué es esto, censura, amenaza, advertencia, qué es esto?
Y ya que pasa por aquí y eso por lo que se ve es todo lo que usted tiene que decir referente a mi directa acusación, sí, directa, soy una mujer muy directa, yo no largo por lo pasillos, largo aquí, ¿estaba usted en ese grupo de aficionados a los que me refiero, o no estaba?
Lo demás es paja, "cucha" el niño, el de la gorra y las patillas de hacha decimonónicas, si las cinco personas mencionadas sabéis perfectamente lo que pasó allí y cómo paso, y la que me formastéis al dia siguiente aquí, en mi casa, también lo sabéis, anda, largo de mis dominios, ¡pues no te queda mili, chaval!

La condesa de Estraza